Nuestra Historia

1987 – Cuenca alta del rio Pance - Reserva Bachué

2016 – Cuenca alta del rio Pance - Reserva Bachué
En la década de los 70´s, e incluso antes, naturalistas y científicos reclamaban la suspensión de la ganadería y de la tala de los bosques primarios de la ladera oriental de los Farallones de Cali, los cuales suministraron la madera demandada por una ciudad que durante el último siglo tuvo un desbordante crecimiento. Argumentaban que los Farallones de Cali son el hábitat de especies endémicas tanto de la flora como de la fauna y que muchas de ellas se encontraban en peligro de extinción, como el gallito de roca, el roble negro y otras que no habían sido evaluadas. Se hacía entonces evidente la necesidad de liderar un programa para la restauración ecológica de la zona y su manejo sustentable, tanto por la importancia de la conservación de la biodiversidad y del ecosistema, como por la necesidad de contrarrestar el cambio climático y contribuir a la mitigación del riesgo que vive Cali por estar asentada en un sistema de humedales.

En este contexto, la Fundación Farallones nace en Cali en 1987 y la primera estrategia fue retirar la ganadería y abandonar los pastizales para promover la regeneración natural en las fincas de propiedad de los socios fundadores. Posteriormente la fundación compro predios con el mismo fin. Para lograrlo, en 1990 se propuso a muchos pintores del país la donación de una obra para ser subastada. Con los fondos obtenidos en la subasta se compraron terrenos y se acondicionó la casa del predio Hato Viejo, en la parte alta de la cuenca a 2300 msnm, como una estación para la educación ambiental y sede para investigadores. La estación albergó durante una década a centenares de excursionistas, grupos de estudiantes e investigadores nacionales y extranjeros, y en el 2003 fue incendiada durante los aciagos actos de guerra librados en los Farallones de Cali.

1990 – Cuenca alta del rio Pance
Subasta de arte realizada para financiar compra de predios de la Fundación Farallones
Te agradecemos de nuevo amigo pintor por aquella mano solidaria que nos brindaste en 1990 y de la cual quedan como constancia, pinceladas de verde y agua que hemos logrado plasmar sobre un pedazo de tierra deforestada y sobre el corazón de muchos hombres y mujeres de esta comarca que hoy disfrutan del río Pance, el río de los caleños, considerado hoy en día uno de los mejor restaurados y conservados del país.




Antonio Grass
Manuel Hernández
Plutarco Idrobo
Bernardino Labrada
Víctor Laignelet
Arnulfo Luna
Diego Mazuera
José Mina
Oscar Muñoz
Alejandro Obregón
Jesús Antonio Patiño
Juan Fernando Polo
Eduardo Ramírez Villamizar
Johnny Rasmussen
Omar Rayo
Carlos Rojas
Ana María Rueda
Carlos Santa Coloma
Germán Silva
Hernando Tejada
Walter Tello
Gustavo Zalamea
Pilar Zea
Diego Pombo
José Orlando Ramos
Gerardo Ravassa
Juan Antonio Roda
María Elena Ronderos
Enrique Sánchez
Mercedes Sebastián
Enrique Tamayo
Lucy Tejada
Alejandro Valencia
Elsa Zambrano
Jim Amaral
Beatriz Ángel
Antonio Azcona
Samira Betancourt
Luis Caballero
Amparo Colonia
Pilar Copete
Danilo Dueñas
Rafael Echeverri
Nancy Friedemann
Beatriz Gonzales
Edgar Álvarez
Olga Amaral
Ever Astudillo
JanBartelsman
Ana María Botero
Santiago Cárdenas
Martha Combariza
María Cristina Cortés
Ana Durán
Fernell Franco
Humberto Giangrandi
Mario Gordillo
Margarita Gutiérrez
Ana Mercedes Hoyos
Maripaz Jaramillo
Consuelo Lago “Nieves”
Alfredo Lleras
David Manzur
Genaro Mejía
Roberto Molano
María Teresa Negreiros
Héctor Fabio Oviedo
Mauro Phazan
A través de la adquisición paulatina de 18 predios ganaderos ubicados en la cuenca alta del río Pance, entre los 1.700 y 2.400 m.s.n.m. y mediante la implementación de programas de regeneración natural, plantación de especies nativas, investigación, educación ambiental, protección de la biodiversidad y desarrollo sostenible, la Fundación Farallones ha logrado conservar y regenerar el bosque de niebla de esta zona, reconocida por su amplia diversidad biológica.

En el año 2002, el vivero Madreselvas se integra a la Fundación Farallones como principal apoyo en la producción de material forestal y en la sostenibilidad de la organización.

Reserva Hato Viejo, Yotoco, Valle del Cauca

Desde el año 2005, la Fundación Farallones ha venido replicando su trabajo de conservación, protección y enriquecimiento florístico con especies nativas en la Hacienda Hato Viejo, ubicada en el municipio de Yotoco, Valle del Cauca. Esta labor de preservación, que ya venía adelantando la familia Garcés —propietaria del predio—, se ha fortalecido gracias a la articulación con organizaciones como la CVC y el Fondo de la Acción Ambiental.
Ese mismo año, la Fundación amplió su labor de recuperación y conservación natural a otras regiones del país, como la cuenca del río Valle, en Bahía Solano (Chocó), y la zona rural adyacente a la Reserva Natural Forestal de Yotoco, donde también se encuentra el predio Hato Viejo.
Actualmente, la Fundación Farallones continúa desarrollando proyectos de conservación en tres ecosistemas representativos de Colombia: bosque andino, bosque seco y bosque húmedo tropical.

El trabajo de reforestación, control y mantenimiento adelantado por la Fundación Farallones ha incentivado la participación comunitaria, el desarrollo institucional local y la conformación de una red de reservas naturales, hoy todas ellas convertidas en bosques regenerados, conservados y protegidos de invasiones o actividades de explotación como la cacería, la minería y la extracción de maderas.


